SAIGO TAKAMORI: "El último samurai".

 

En este texto se pretende mostrar  parte de la vida de Saigo Takamori, concretamente la rebelión que encabezó, del que fuera conocido como el último samurai, y que se relaciona y es más conocido(aunque poco tiene que ver) con el Katsumoto del film de Hollywood El último samurai.

 

Con la firma del tratado de Kanagawa en 1854 Japón abrió sus relaciones comerciales con EEUU y dos de sus puertos quedaron abiertos para llevar a cabo dicha actividad; otros paises como Francia, Inglaterra o Rusia también se beneficiaron de dicha apertura, y aunque Japón obtenía su parte en dicho proceso las condiciones de igualdad no fueron todo lo deseables que se esperaba por lo que en la clase samurai se comenzo a generar un malestar generalizado.

A raíz de estos hechos nació el movimiento de lo shishi, hombres de excelsos ideales y cuyos principios giraban en torno a los ideales de sonno, solo reverenciar al emperador, y jin, desterrar a los barbaros. Dentro de este movimiento encontramos la importante figura de Yoshida Shoin(1830-1859),cuyo estandarte fue defender la idea que el shogun no sabía llevar a cabo las premisas antes nombradas. Trás el pacto con EEUU yoshida afirmó que llegaría " la colera de los dioses y los hombres", y defendió la idea de que era legítimo matar defendiendo los principios de la justicia.

En noviembre de 1866, el emperador concedió a las provincias rebeldes de Satsuma y Choshu permiso para revelarse contra el shogun, el cual en poco menos de un año se decidió a entregar el poder al emperador Mutsu Hito; esto fue algo que no sentó demasiado bien entre los hombres cercanos al shogun por lo que en 1868 cuando el emperador declaró que asumía todo el poder, Tokugawa Yoshinobu afirmó que semejante paso era ilegal y atacó Kyoto, la sede del emperador, comenzando así la guerra Boshin. Las tropas de Tokugawa eran tres veces mayores en número que las imperiales, no obstante fueron derrotadas en Toba y obligadas a retirarse a Edo.

Es apartir de este momento cuando se hace fuerte la figura de Saigo Takamori que dirigió las fuerzas imperiales durante los meses siguientes obteniendo magnificos resultados por el norte y el este de Japón y, para en mayo de 1868 consiguir la capitulación de Edo. Desde este momento y en un gesto cargado de simbolismo, el emperador trasladó la capital a Edo que comenzaría a llamarse Tokio.

Aunque todavía hubo algún clan que se empeñó en resistir a finales de 1868, la victoria imperial era completa y daba inicio la Era Meiji.

A partir de este momento y con la restauración los samurais empiezan a verse realmente en peligro y al márgen, pues las reformas les afectaban directamente; Takamori se convirtió en consejero de estado y general del imperio cuyas ideas se fundamentaban en extender el poder del imperio con planes como anexionarse Corea y el cese de las relaciones con los extranjeros a los que seguían viendo como bárbaros invasores; era como pregonar la vuelta a los tiempos de los Tokugawa, algo que no fue admitido y terminó con la dimision de Takamori y el regreso de este a Kagoshima.

En contra de stas premisas Mutsu Hito abolió definitivamente el regimen feudal, implantando medidas totalmente nuevas y reformadoras; el regimen militar se instauró de forma oblgatoria en 1872 con el fín de democratizar el oficio al modo del ejercito francés, viendose estas reformas en otros campos como la educación la sanidad o la moneda.

Los samurais fueron privados de su derecho a portar el daisho(simbolo de su status)en 1876 y su reconocimiento como clase social superior, declinó estrepitosamente, viendose en un contexto social al que no podian o les costaba mucho adaptarse, pues su mentalidad y la perdida de sus privilegios como casta y el tener que rebajarse en ocasiones a realizar el trabajo de granjeros suponia para ellos una situación demasiado indigna lo que produjo que se organizaran levantamientos que terminaron en una revolucion acaudillada por Takamori.

En 1877 Takamori inicio la marcha sobre Tokio con la intencion de derrocar el gobierno con un tropa que fue reclutando en su camino hacia la capital formada por miles de hombres contrarios al nuevo regimen llegando a ser según cuentan algunas fuentes unos 50.000 hombres. El ejercito moderno que a pesar de estar formado en su mayoría por plebe, gracias a las técnicas modernas y a un equipamiento modernamente mas avanzado consiguió la victoria en aproximadamnente en una semana.

Como consecuencia de la victoria no se volvieron a tomar las tradiciones pasadas que reclamaban lo samurais y en 1878 se cearon los parlamentos, evolucionando el poder poítico hacia la monarquía constitucional, eso si, el gobierno reconocio publicamente el valor de Saigo Takamori siendo indultado de manera postuma.

Aunque la clase samurai desapereció de forma definitiva en el S.XIX,de una forma traumática y poco romántica, gracias a un puñado de hombres el bushido quedo anclado con profundas raices en el corazón del pueblo japonés quedando patente su caracter belicoso y guerrero en otros episodios de la historia que ahora no vienen al caso.

Actualmente ese espiritu sigue vivo y para los que vivimos conocemos y tratamos de practicar a la vez que comprender su significado es parte de la vida cotidiana.

 

 Como ya he apuntado, Takamori fue homenajeado de manera póstuma y se erigió un estatua en su honor, no obstante y aencdóticamente cabe señalar que a la hora de representarle se decantaron por mostrarle con un atuendo común y junto a un perro como un  ciudadano más, en vez de con la indumentaria de un guerrero, todo ello con el fín de no recordar acontecimientos pretéritos y evitar una nueva insurrección.

 

 

 

                                                                              Texto de:  Antonio Clemente.

 

                                                                                         14-Diciembre-2009.

 

Saigo Takamori. "El último samurai".
Saigo Takamori. "El último samurai".